Asaltada en el descanso por infinitos puntos rosas que bañan mi vestido haciéndome bailarina descalza. Un descanso de pájaros en forma de almohada y mi boca abriéndose a sueños que cosen lo cotidiano . No alcanzo a desenredar mi pelo negro en tus brazos llenos de calambres. Una luz de fibras de hielo me ha congelado la garganta. Caramelo deslizandose por la pared desnuda. Espasmos sepia. Y sin embargo el viento mece lo no dicho.
bellísimo.
ResponderEliminarGracias. Bello tu blog tambien.
EliminarLa palabra viento no necesita espacio...dices.
si... eso parece. transcurre sin reclamar nada.
ResponderEliminar(ni siquiera un lugar.)