lunes, 2 de mayo de 2011

Me ilumina tu oscuridad

Al entrar en mí me iluminas, llevas el faro del amor roto en las entrañas y prendes mi llama con el candil de las preguntas no dichas. Una ceremonia de escarabajos organiza el jardín de los sueños, llevan ramitas entre sus alas y hacen coronas doradas para nuestros dedos. Cuando me abrazas algo cruje en las paredes, se cierran las grietas y las ventanas se abren solas para ventilar el deseo. Es el fantasma de la posibilidad, que se ha instalado entre el vacío de las habitaciones olvidadas.


Es algo cotidiano, organizar la casa como si fuera nuestro cuerpo, cambiar las sábanas de nuestros anhelos, mordernos como se besan los pájaros, tocarnos como se desordenan las hojas en el jardín, fluyendo, dejándonos llevar por el viento de los gemidos libres.
Te miro dormir y la palabra intensidad me congela el sueño, detenida en tus ojos cerrados. Verte reir es abrir el cofre de las mariposas dormidas.


Han germinado los días del encuentro en primavera y dejas escrito en mi cuerpo el verbo amar. Espero volverte a recibir. El buzón de mi vientre tiene escrito tu nombre y el mio. Mándame mensajes en clave de amantes. Y que la verdad siempre nos acompañe.

1 comentario:

  1. Aqui la que escribe de maravilla eres tú...qué texto tan bonito...

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